sábado, 3 de julio de 2010

Oxford como terapia

A ver, creo que no estáis alcanzando a comprender la magnitud del asunto: llevo 5 años en la Gran Patraña y siempre que alguien pronunciaba la palabra maldita "verano" yo saltaba: aquí no hay verano. Y todos se reían. Pues bueno, es hora de comerme mis palabritas una a una y sin salsa. ¡Llevamos un mes de Verano Total! No os hacéis una idea de la contentura que tengo encima. Los parques están amarillos, no se puede dormir del calor por las noches, los mosquitos ansían mi sangre, las piscinas están abarrotadas... summertime.

La última vez que vine a Oxford debió ser en Junio 2008, cuando aún vivía en Notting Hill y no sabía nada sobre el este de Londres ni sobre muchas otras cosas. Desde Oxford se lleva la bookshop online y es maravilloso.

Mi Jefe tiene un psychological insight que no se lo cree ni él. Es un desastre en cuanto a organización práctica, pero las relaciones personales son su fuerte sin duda. Es el mejor jefe del mundo, y no porque nos dé toda la libertad (para todo) y más, sino porque parece el típico británico despistado, con sus bermudas y su camisa floreada de franela - y las chanclas con calcetines - pero en cuanto te descuidas te demuestra lo calada que te tiene.

Sin venir a cuento me dijo el miércoles: Lu, el viernes te vienes a Oxford conmigo, que hace mucho que no vas. ¿Y qué ocurre en Oxford? Pues que es un paraíso de cajas sin abrir, de libros desperdigados por cualquier rincón de las cuatro naves industriales que tienen. Venir aquí es reafirmar tu condición de librera por naturaleza, y recuerdas casi con lágrimas en los ojos la suerte que tuviste al encontrar trabajo en SKOOB. Es mucho más que una librería. Vaya, tengo la emoción a flor de piel. Pues claro que me quiero quedar aquí, en Londres digo, (¡amiga no temas!). Además, el Jefe y Polaca II se van 10 días en agosto y dice que me deja la furgoneta... Cornwall here go go!

Mis quehaceres en Oxford se han limitado a volverme locatis inspeccionando todas las cajas que me ha dado la gana y elegir libros que no tiene sentido que se cataloguen onlinemente porque en la tienda física de Londres - donde no tenemos catálogo - se van a vender ipsofácticamente. Sólo solemos catalogar libros que por H o por B resultarían demasiado caros para el comprador de a pie, como una primera edición de Beckett y cosas por el estilo.

En total me he llevado ocho cajas para la bookshop, a unos 25-30 libros por caja. ¿Que si he encontrado algún regalito para mí? Hello?? ¡La duda ofende! Por supuesto. Para empezar una copia exacta a la segunda antología de Daniil Kharms que no compré en Nueva York porque me salía del presupuesto; un compendio de literatura lésbica desde el siglo XVII hasta nuestros días; una colección de cuentos de Leskov y una novela de Alexandra Kollontai que no tenía... almacenar, almaCENAR, ALMACENAR!!!

Jjijijijijjiji

Mind you, me siento mucho mejor, aunque he vuelto a caer enferma. Hummm, debería comer más verdura.

2 comentarios:

Cesc Sales dijo...

Hola, hace ya algun tiempo que vengo leyendote. He visto que has estado recientemente en NY y he leído tus post referentes a la ciudad.

Este verano visito la city por segunda vez. ¿Alguna propuesta que se salga de la común? Algo original que ver, hacer...

Felicidades por el blog y por la foto del blog de Jorge.

La chica automática dijo...

Gracias cari.

Pues me gusto MUCHO la comida, es lo que siempre digo, tengo que transcribir por aqui una cosa que escribi sobre todos los restaurantes o similares que visitamos. Diossss!! Gordura divertida! Te diria que te sumerjas en Brooklyn, cerca de Williamsburg hay un parque cuyo nombre no recuerdo que tiene unas vistas de Manhattan maravillosas (esta muy cerca del Brooklyn Bowling, la bolera del barrio que tiene conciertos guachis). Y tambien las vistas desde Brooklyn Heights, la zona mas pudiente, donde vive la gente rica y petarda tipo Paul Auster que se jactan de vivir en Brooklyn, en plan mira que bohemio, y es tan heavy como el Upper West Side.

Pasear por Harlem y comer pizzas sin parar. No me dio tiempo Coney Island y me quede con muchas ganas la verdad.

Ya me diras!!