domingo, 17 de abril de 2011

¿Post equivocado pero profético?

Llevo todo el día en la London Book Fair y lo que más miedo me ha dado es que ya no hay libros, hay libros electrónicos o libros de papel (ebooks o pbooks). No. Me niego. Un libro es un libro. Un ebook es una mierda, digo un ebook. Me está costando tanto todo. Dentro de diez años, o menos, ya estarán todas estas novedades totalmente establecidas y sabremos si vamos a tener que decir adiós a la palabra libro. ¿Va a quedarse obsoleta esta palabra? Para mí no. Igual que no tengo tele ni smartphone ni cámara de fotos y escribo a máquina. No sé si fue el Lector Ileso o Lector Iracundo el que dijo de Javier Marías que jactarse de usar a día de hoy una Olivetti es como ir en burro y sacar pecho. Me hizo muchísima gracia, pero I'm afraid que yo igual.

Digo que me cuesta pero supongo que tarde o temprano esta ola digital me cogerá y no tengo muchas ganas pero yo que sé, reconozco que estamos en una nueva era (bye bye Gutenberg) que está aquí para quedarse y ¿hacer obsoleto lo que hasta ahora había? No lo sé. Yo no quiero. Todos los grandes editores repiten que el libro jamás morirá, como no ha muerto la bici. ¿Es sólo miedo al cambio?

Esto lo escribí el lunes, cuando de verdad fui a la feria, y resulta que estaba equivocada: pbook no se refiere a paper-book sino que es el ebook de Mac, o algo así me han contado. Me da igual, mira tú, yo me lo creí totalmente, lo de que a partir de ahora se hablará de libros electrónicos y libros de papel. Porque soy capaz de imaginarme este realidad, esta soplapollez con sus maquinitas y sus scroll down y sus, sí, clicks.

Me voy a Bruselas. A la vuelta haré crítica, que nunca hago, de mis chicas: Jenny Diski y Lynne Tillman.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Puede comprarse un cohce de carreras, eso no la va a hacer conducir como a... iba a decir Alonso, pero está en un momento muy bajo desde que se casó con esa niña popera. Antes la mujeres que cantaban coplas se casaban con toreros, ahora las poperas con deportistas, futbolistas o pilotos. No existe la justicia poética. Es otra falacia que anima a la resignación, como eso de que si nos portamos bien,,,
Con los libros pasa lo mismo, el soporte no es lo que importa, eso sólo forma parte de la forma de hacerlo llegar a la gente para que el escritor pueda vivir dignamente de su obra. Supongo que encontrarán la forma de que se pueda seguir ganando dinero siendo un escritor, aunque es sabido que lo que se hace por dinero pierde cualquier belleza que pudiera albergar. Muchos buenos escritores no encontraron el éxito en vida. Ahora bien, los libros de viejo, creo que se llaman así, eso son libros de coleccionista, primeras ediciones, o ediciones especiales muy antiguas, donde lo que vale es el objeto y no lo que dice. Jum... buen tema para desarrollar au lycée, aunque ya me queda un poquito lejos.

reconozco que me he puesto un poco pastoso, pero me daba cosa el cerito.

Saludos rubia

Jorge dijo...

Máquina de escribir.. y recuerdo aquello de Truman Capote que diferenciaba entre escritores y mecanógrafos...

Ains el tiempo qué maravillosamente cíclico que es...

p.s. yo he vuelto al boli y la libreta... por joder a los futuros buscadores de manuscritos con mi mala letra.